LeBron James sigue ganando adeptos a su causa en cada partido. Los últimos en unirse fueron los aficionados de los Rockets que terminaron cantando «MVP» al alero de los Lakers durante la victoria de los angelinos en Houston con 31 puntos y 12 asistencias. «No podía pedir nada mejor. Ser capaz de jugar a un alto nivel con un gran equipo y en una franquicia histórica como los Lakers», aseguraba el jugador de Akron tras el choque ante la franquicia tejana.