Con mejores sensaciones y sin dejarse un set por el camino como le ocurrió en su debut contra el alemán Struff, Novak Djokovic pasó a la tercera ronda del Open de Australia tras lograr una victoria de precisión quirúrgica contra el invitado japonés de 31 años y 146º del mundo Tatsuma Ito: 6-1, 6-4 y 6-2 en 95 minutos. El serbio mejorado y más fresco que el pasado lunes, se enfrentará el viernes a otro nipón, que será un rival bastante más complicado, Yoshihito Nishioka, que apeó al británico Dan Evans con suma facilidad (6-4, 6-3 y 6-4).

«Estoy jugando con todos los japoneses que hay», bromeó el número dos del ranking tras su victoria. Sólo tardó 22 minutos en apuntarse un primer set que abrió con un abrumador 5-0. En la segunda manga Ito aguantó mejor, hasta que en el séptimo juego, Nole se apuntó un quiebre y no soltó la ventaja. Desde ahí, el balcánico ganó siete de los últimos nueve. Así abrochó su victoria número 70 en un torneo que ha ganado siete veces y en el que defiende título por cuarta vez. «He manejado el partido para encontrar mi camino de alguna manera. El servicio me ha ayudado mucho para no tener problemas», analizó Djokovic.