Hay rivalidades que nunca acaban y la de Isiah Thomas y Michael Jordan es una de ellas. Las batallas entre Pistons y Bulls a finales de los 80 y principios de los 90 causaron una herida muy profunda que no se ha conseguido cerrar, así como la exclusión del propio base del Dream Team de los Juegos Olímpicos de Barcelona, en 1992. Jordan jamás perdonó que Thomas se fuera sin saludar tras, por fin, la victoria de su equipo ante los Bad Boys de Detroit en 1991, camino hacia el primer anillo. Y la estrella de los Pistons siempre criticó la teórica influencia de His Airness en la decisión de que se quedara fuera de la selección de Estados Unidos del año siguiente.

En el documental The Last Dance se hace incidencia a todos estos momentos. La animadversión que ambos jugadores se profesaban era mutua, y Thomas no hizo más que aumentar su mala reputación con su actitud en el momento en el que se hizo público el VIH que padecía Magic Johnson, otrora amigo suyo, luego enemigo y, finalmente, un hombre con el que se reconcilió públicamente. Eso no ha pasado con Jordan, con el que las pullas y las declaraciones cruzadas no se han dejado de suceder a pesar de que ambos llevan ya mucho tiempo retirados. Isiah desde 1994 y Jordan, por última vez, en 2003.

“Cuando estaba viendo el ‘The Last Dance’ estaba con mi familia y pensaba que todo estaba bien. Y luego aparece este tipo en la televisión y dice que me odia y me llama imbécil. Y después procedo a ver un documental completo sobre él siendo un imbécil. Estoy como, espera un minuto, tiempo muerto. Hasta que no obtenga una disculpa pública, esta pelea va a continuar durante mucho, mucho tiempo. Porque soy del lado oeste de Chicago”, ha dicho Isiah Thomas durante una entrevista concedida a un medio griego cuyas declaraciones ha recogido Eurohoops.

La situación sigue igual. Pasan los años, y Isiah y Jordan siguen enfrentados en una disputa eterna que comenzó hace mucho tiempo pero que se mantiene en la actualidad. His Airness sigue siendo considerado por muchos uno de los mejores jugadores de todos los tiempos, aunque su actitud en el documental producido por él mismo suscitó quejas de muchas personas. Thomas, por su parte, es uno de los bases más importantes de siempre, pero su leyenda ha sido perjudicada por la opinión pública y por algunas de las actitudes que tuvo en sus años como profesional… y quizá, también por las constantes críticas vertidas por Jordan. Una pelea eterna.