En la tarde del viernes, antes de que Trevor Bauer anunciara que firmaría con los Dodgers, le envié un mensaje de texto al manager Dave Roberts para conocer su opinión sobre el tema de Bauer.

“Creo que estamos ahí”, fue su respuesta.

Ahí para ganar la puja, como resultó.

Bauer lanzará para Roberts en la próxima temporada, en el tope de una rotación de los campeones reinantes que cuenta con Clayton Kershaw, Walker Buehler y David Price. Los Dodgers no sólo son los actuales campeones de la Serie Mundial, también han ganado los últimos ocho banderines de la División Oeste de la Liga Nacional y han avanzado a tres de las últimas cuatro Serie Mundiales. Los Ángeles invirtió mucho dinero en Bauer por un pacto a corto plazo.

A comienzos del fin de semana, mientras el mariscal de campo Patrick Mahomes y los Chiefs se preparaban para buscar su segunda corona consecutiva en el Super Tazón, los Dodgers hicieron una movida para intentar algo similar con Bauer. Hace alrededor de un año añadieron a Mookie Betts. Ahora, adquirieron al actual Cy Young de la Liga Nacional.

Claro, eso no le garantiza nada a Los Ángeles. Los Padres están armados y los Cardenales mejoraron considerablemente cuando adquirieron a Nolan Arenado desde los Rockies. Los Mets mejoraron al obtener al puertorriqueño Francisco Lindor, aun a pesar de no haber podido pactar con Bauer. Los Yankees nunca desparecen. Pero los Dodgers – actuales campeones de los pesos pesados del deporte – mejoraron. Incluso cuando no es la mejor de las noticias para el resto de los equipos que buscan destronarlos en el 2021, la firma de Bauer es la mejor noticia para el béisbol.

Creo que en cualquier deporte, cuando hay un Super Equipo, todo es más interesante. Incluso cuando los Gigantes ganaron tres títulos en la década pasada, nadie los veía como tal. Los Medias Rojas han ganado cuatro Series Mundiales desde el 2004. Podemos debatir el significado de “dinastías” en el deporte. En mi opinión, la última en el béisbol fueron los Yankees de Joe Torre, que ganaron cuatro Series Mundiales en cinco años entre 1996 y el 2000 y casi añaden otra más en el 2001.

Pero los Dodgers ciertamente parecen tener el chance de hacerlo. Los Ángeles piensan que deberían estar preparándose para su tercer título en cinco años en el 2021. Ese pudo haber sido el caso si los Astros no hubiesen robado señas en la Serie Mundial del 2017. Ahora los Dodgers cuentan con tres grandes abridores. David Price, que optó por no jugar el año pasado y el mexicano Julio Urías — una de las estrellas de la pasada postemporada — están después. Además, hay tres estrellas en la alineación de Roberts:

Betts, Cody Bellinger y Corey Seager.

Betts y Bellinger son dos ganadores del Jugador Más Valioso y Seager fue el JMV de la Serie de Campeonato de la Liga Nacional y de la Serie Mundial del 2020. El mayor de los tres es Betts y tiene 28 años. Incluso Kershaw, quien también tiene un JMV en su haber y tres Cy Youngs, no cumplirá 33 hasta marzo. Pero por ahora, Buehler, Bauer, Betts, Bellinger y Seager están en su mejor momento. Los Rojos – el antiguo equipo de Bauer – fueron llamados alguna vez la “Gran Maquinaria Roja”. Cincinnati no tenía el pitcheo que ha conformado “La Gran Maquinaria Azul” en el Dodger Stadium.

Por muy talentosos que sean los Dodgers, aún tienen vacíos. No tienen a un cerrador dominante. Aunque muchas personas esperan que se consuma el regreso de Justin Turner a la antesala del equipo, Los Ángeles necesita un bateador derecho de impacto. Pero por muy buenos que ya eran antes de la adquisición de Bauer, incluyendo la presencia de uno de los mejores managers en el béisbol (y algunos comienzan a pensar que sea el mejor en la historia del equipo), lo que resalta aquí es que el grupo de propietarios y el presidente de operaciones Andrew Friedman decidieron no quedarse de brazos cruzados, especialmente después de lo hecho por los Padres.

Los Dodgers tomaron un riesgo importante el año pasado y le dio resultados. Ahora lo volvieron a hacer con Bauer.