Después de una jornada caótica, con escenas de violencia generadas en la despedida de Diego Armando Maradona cuando efectivos de la Policía de la Ciudad lanzaron balas de goma y gases lacrimógenos a los presentes, finalmente el féretro fue retirado a las 17.44 de Casa Rosada, hacia su morada final en un cementerio de la localidad bonaerense de Bella Vista. Por expreso deseo de la familia se llevó a cabo una ceremonia íntima, para darle descanso en el mismo sitio donde están enterrados los restos de sus padres, Doña Tota y Don Diego, fallecidos en 2011 y 2015, respectivamente.

El cortejo fúnebre cambió el recorrido original y tomó por Paseo Colón hasta la Autopista 25 de Mayo, Perito Moreno, Acceso Oeste, Camino del Buen Ayre y calle Roca hasta el cementerio Jardín de Bella Vista, en el partido de San Miguel. 

Después de una jornada caótica, con escenas de violencia generadas en la despedida de Diego Armando Maradona cuando efectivos de la Policía de la Ciudad lanzaron balas de goma y gases lacrimógenos a los presentes, finalmente el féretro fue retirado a las 17.44 de Casa Rosada, hacia su morada final en un cementerio de la localidad bonaerense de Bella Vista. Por expreso deseo de la familia se llevó a cabo una ceremonia íntima, para darle descanso en el mismo sitio donde están enterrados los restos de sus padres, Doña Tota y Don Diego, fallecidos en 2011 y 2015, respectivamente.

EL CORTEJO FÚNEBRE CAMBIÓ EL RECORRIDO ORIGINAL Y TOMÓ POR PASEO COLÓN HASTA LA AUTOPISTA 25 DE MAYO, PERITO MORENO, ACCESO OESTE, CAMINO DEL BUEN AYRE Y CALLE ROCA HASTA EL CEMENTERIO JARDÍN DE BELLA VISTA, EN EL PARTIDO DE SAN MIGUEL. 
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El fin del velorio tuvo lugar después de que los asistentes treparan las rejas de Balcarce 50 e ingresaran al patio de Las Palmeras. Una reja del ingreso a la Casa Rosada se venció por la fuerza que ejercieron los fanáticos, lo que produjo un desborde y avance sin control.

Las imágenes de violencia y de desborde por la duración del último adiós a Maradona  generaron cambios de cronograma constantes, y fue en ese momento que la policía  comenzó a avanzar sobre las personas que fueron a Plaza de Mayo. En medio de escenas de extrema tensión, dentro de Casa Rosada se encontraban el presidente Alberto Fernández y la vicepresidenta Cristina Kirchner. “Si no hubiéramos organizado esto, todo habría sido peor, porque era imparable“, afirmó el jefe de Estado, quien aseguró que “funcionó muy bien hasta que algunos, viendo que el horario los iba a dejar afuera, se precipitaron, rompieron la puerta de entrada y todo se complicó“.

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