AS- Si ayer te dio la sensación de que todo el mundo estaba hablando del documental de Michael Jordan… es porque todo el mundo estaba hablando del documental de Michael Jordan. The Last Dance es un trabajo mastodóntico de 10 capítulos que analiza la figura del casi por consenso mejor jugador de baloncesto de la historia a través de su convulsa temporada 1997-98, la de su sexto y último anillo con unos Bulls que después se desmantelaron. Se fueron él, Scottie Pippen, Dennis Rodman, Steve Kerr, Luc Longley… y hasta Phil Jackson. El último baile.

ESPN tenía previsto el estreno para junio, pero la suspensión de la temporada en la NBA (el 11 de marzo) disparó las peticiones de clemencia de unos aficionados de la NBA ávidos de emociones fuertes. Y estos han respondido, vaya que sí. El domingo (21:00-23:00 de la Costa Este) ESPN estrenó los dos primeros capítulos (quedan ocho…), que llegaron al resto del mundo ayer lunes a través de Netflix. En Estados Unidos, jamás se había visto tanto un documental de ESPN ni un programa deportivo (partidos al margen) desde la llegada de los canales de pago y la televisión por cable: 6,1 millones de telespectadores de media, muy por encima de la previsión de incluso los más optmistas. Una locura.

El primer capítulo reunió a 6,3 millones d personas ante la televisión, el segundo a más de 5,8. Fue el programa más visto por la audiencia de entre 18 y 49 años (3,5 millones) y desde luego dominó la conversación cultural durante todo el día de ayer: 25 de los 30 primeros trending topics en EE UU estaban basados en The Last Dance, que acaparó las búsquedas en Google y tuvo un alcance, en términos de engagement, de 9 millones de interacciones entre Facebook, Instragram y Twitter. Hasta los programas especiales emitidos antes y después del documental reunieron en las plataformas digitales de ESPN a más de 3,5 millones espectadores.

Esa locura tendrá también efecto, claro, en las finanzas del propio Michael Jordan. Forbes ha estimado que el mítico 23 ganará unos 4 millones de dólares con The Last Dance y ha anunciado que irán destinados de forma íntegra a causas benéficas. Otra canasta de una leyenda única.