Jos Verstappen habla en ‘De Telegraaf’ coincidiendo con el fin de semana que debía acoger en primer GP de los Países Bajos en más de dos décadas. No hay monoplazas en Zandvoort este domingo y previsiblemente no los habrá en 2020: «Esta carrera debe ser una fiesta con público». No habrá gradas vacías en el circuito de la playa neerlandesa. El expiloto de F1, que superó la centena de grandes premios entre 1993 y 2003 y logró dos podios, habla también de la situación de su hijo, Max Verstappen, renovado hasta 2023 con Red Bull y en condiciones de luchar por el Mundial a corto o medio plazo.

“Negociar un nuevo contrato en esta situación sería una distracción. Nosotros estamos muy contentos en Red Bull y realmente pienso que estaremos más cerca este año que el anterior. Seguimos siendo muy positivos, como antes», asegura Jos, que pone en valor las actuaciones de ‘Mad Max’, con ocho triunfos y dos poles en sus 102 participaciones: «La gente tiende a olvidar que Max tiene que tomar más riesgos porque va en un coche más lento que, por ejemplo, Hamilton. Max siempre pilota en el verdadero límite. Y el público lo que quiere ver es eso». «ettel y Hamilton se ponen un poco nerviosos cuando Max está detrás de ellos, ¿a que sí?», subraya el padre del piloto.