A trancas y barrancas y dejándose un set por el camino, Serena Williams pasó a la tercera ronda de Roland Garros y continúa con la persecución de su ansiado 24º título de Grand Slam con el que iguale el récord de Margaret Court. La estadounidense venció a la segunda rumana con la que se enfrentaba este año en el torneo, Mihaela Buzarnescu, por 6-3, 5-7 y 6-1, y se enfrentará a su compatriota Danielle Collins, que será una rival complicada y pasó por encima de la ucraniana Kalinina (6-0 y 6-2). «Es realmente una persona asombrosa fuera de la pista. Adoro verla en los vestuarios. Hubiera sido ideal que no tuviéramos que enfrentarnos, porque siempre quiero que le vaya superbien», dijo la reina del tenis femenino sobre su compañera.

No le convenía a Serena pasar más tiempo del necesario en pista y necesitó dos horas y tres minutos para doblegar a una oponente a la que hubiera barrido en otros tiempos. A pesar de todo, no hizo un mal partido y cogió ritmo para lo que vendrá en una parte del cuadro con rivales de aúpa.

Quizá la que está más en forma es la tercera favorita, Aryna Sabalenka. La bielorrusa no sufrió demasiado para apear a su paisana Sasnovich (7-5 y 6-3 en 89 minutos). La bielorrusa sumó 27 golpes ganadores y salió airosa de una batalla de quiebres (14 en total). En la próxima ronda se verá con la rusa Pavlyuchenkova, que venció a la australiana Tomljanovic (6-2 y 6-3). Otra jugadora de ese país tan fructífero en tenistas, Victoria Azarenka, prevaleció contra la joven perla danesa Tauson (18 años) y se las arregló para ganar por 7-5 y 6-4. Topará ahora con una rusa, Vesnina, que pasó por la desafortunada renuncia de la checa Kvitova. Su compatriota Siniakova no pudo con otra tenista del mismo país, Marketa Vondrousova (20ª favorita), que se deshizo de ella con un 6-1 y 6-3.