“El trabajo y los resultados serán los que finalmente hablarán, sea lo sea lo que decida. Eso es lo que importa, os lo prometo. Esos ‘mock drafts’ no lo hacen ni un poco. A todos esos otros chicos que están esforzándose para ser grandes: mantened la cabeza abajo, poneos las orejeras y seguid machando”, escribió LeBron James recientemente en sus redes sociales a la luz de una predicción de cara al draft de 2024 que sacaba a su hijo Bronny de las listas y le mandaba a las del siguiente año, 2025.

LeBron será noticia el próximo verano por su situación contractual, tiene una opción para renovar con los Lakers por más de cincuenta millones o sería libre, y de la misma lo será su vástago, que lucha por progresar en la competición universitaria después de superar un paro cardiaco sufrido en un entrenamiento el año pasado.

Con los Trojans de la Universidad de Carolina del Sur el júnior, novato en la División I de la NCAA, promedia 5 puntos, 2′8 rebotes y 2′4 asistencias en un conjunto que sí tiene un destacado: el base Isaiah Collier.

Bronny arrastra no sólo la etiqueta de ser un James, sino que su futuro se ha ligado al de su padre desde que éste proclamara a los cuatro vientos que intentaría jugar con su hijo en la gran liga. Se habla menos, que es a lo que se refería LeBron, de su potencia arriba y abajo o su progreso gradual y más de a qué equipo irá.

“No valoro que un jugador joven se mete en la ‘draft lottery’ tanto como que vaya al equipo adecuado con una buena situación para que mejore”. Son palabras de Rich Paul, representante de padre e hijo, sobre las opciones que tendrán sobre la mesa. “LeBron quiere que Bronny sea él mismo”, añadió el periodista Adrian Wojnarowski, que habló con él. Esto significa que se abre el futuro bidireccionalmente para el prospect de 19 años, siendo otro dilema si lanzarlo ya o esperar a que tenga 20.

Los caminos de LeBron James y Bronny James

Como ha deslizado Klutch a través de Paul, valorarán las propuestas en la NBA en base a cómo sea el camino que tienen pensado seguir con Bronny. Los Lakers son la franquicia a la que todos mirarán, obviamente, por la influencia de su padre y la posibilidad de juntar a los dos al menos por un tiempo, que se cumpla ese sueño familiar, pero no serán los únicos. En trazar un buen plan estará el éxito para el trojan este mismo año; los jugadores que aspiran a ser elegidos en el draft se reúnen con las franquicias interesadas, además de hacer con ellos una prueba de nivel, para meterle o no entre los futuribles para sus picks; será con esa información con la que los James tomen una decisión. Pudiendo caer el joven hasta fuera de las posiciones del Draft 2024 habiendo sido inscrito, siempre se empezaría una negociación con Pelinka y los Buss en L.A. La edad del progenitor, que en el trascurso de la próxima temporada cumplirá 40, es otro factor. LeBron, pese a la calidad que exhibe, está en el ocaso de su carrera. La incógnita que nadie sabe despejar de momento es si la determinación de uno afectará al otro y viceversa, algo que desde su agencia de representación han expresado que no será tal.