Que la ‘Wembanyamanía’ ya está aquí es irrefutable. Tras muchos años en la sombra, los Spurs vuelven a estar en el mapa y todo es culpa de la joven promesa francesa, cuya llegada a la NBA ha revolucionado la liga… y los precios de las entradas.
Solamente hay que tomar como ejemplo el partido de esta madrugada que los de San Antonio han disputado ante los New York Knicks. El año pasado, la entrada más barata para ver este partido en el Madison Square Garden era de 98 dólares. Esta temporada, todo aquel que quiera ver el mismo partido tendrá que desembolsar un mínimo de 250 dólares.
Obviamente, tal abismal diferencia se debe a la presencia de Wembanyama, que a pesar de no haber quedado muy impresionado con una de las grandes catedrales del baloncesto, ha desatado la pasión en la Gran Manzana.