La FIA ha decidido ser más rigurosa. El organismo rector del automovilismo ha metido mano en el reglamento con una nueva normativa para retocar el proceso de revisión.

Durante la temporada 2023, hubo cuatro célebres casos en la F1 que recuerda todo el mundo. A saber: Aston Martin (en Bahréin), Ferrari (en Australia), McLaren (en Austria) y Haas (en Estados Unidos). Todos ellos protestaron en las mencionadas citas y exigieron revisar decisiones que les perjudicaban.

Reducción drástica y tasa

El caso es que anteriormente se gozaba de 14 días para reclamar y ahora son sólo 96 horas. Esto es lo que dice la norma que entrará en vigor en 2024: «El plazo durante el cual se puede presentar una petición de revisión expira transcurridas 96 horas desde el final de la competición en cuestión, excepto circunstancias en las que los comisarios consideren que el cumplimiento del plazo de 96 horas sería imposible, en cuyo caso los comisarios podrán ampliar ese plazo en un máximo de 24 horas».

Aparte de reducir el margen para presentar una solicitud, las escuderías tendrán que pagar: «Cada petición debe ir acompañada de un depósito, cuyo importe será fijado anualmente por la ADN matriz de la categoría internacional; o por la FIA para sus campeonatos, copas, trofeos, desafíos o series. Además, el depósito deberá estar especificado en el reglamento deportivo o en el suplementario de la competición. Ese depósito solo podrá devolverse si se estima el derecho de revisión, salvo que la equidad exija lo contrario».

Recordemos que esto entra dentro del marco de una política más estricta. Los comisarios pueden ahora imponer multas más elevadas. En el pasado, el límite era de 250.000 euros y ahora es de un millón para la F1.

Una cuarta rama en el reglamento

Por otra parte, la FIA ha diseñado una nueva sección para incluir en el reglamento para la F1 que se pondrá en marcha en 2026. Nikolas Tombazis, director de monoplazas de la Federación Internacional, ha desvelado que el objetivo de la institución es impedir que los equipos actúen a su antojo con respecto a la sostenibilidad y la huella de carbono cero.

«Actualmente tenemos tres conjuntos de regulaciones: técnica, deportiva y financiera… y se introducirá una cuarta rama en 2026. Esto tiene como objetivo dar los primeros pasos hacia las metas a medio y largo plazo de Net Zero para 2030. Claramente, no alcanzaremos las cero emisiones netas para 2026, pero nuestro objetivo es crear el marco sobre el cual construiremos gradualmente, a lo largo de los años, restricciones para los equipos. Hemos tenido algunas reuniones iniciales con los equipos y continuaremos teniendo reuniones periódicas entre la FIA, la FOM y los participantes para diseñar la mejor estrategia», ha indicado el dirigente.