Rafael Nadal ha concedido su primera gran entrevista desde que hace exactamente ocho meses jugó su último partido, en el Abierto de Australia. Unos meses despuéa anunció que no jugaría durante el resto de la temporada. Ahora, un Rafa distendido y con buen aspecto charló con Juanma Castaño ante las cámaras de Movistar Plus+. Y ha dejado entrever que su decisión de abandonar las pistas en 2024 dependerá de su estado físico.

Rafa señala que en los últimos meses ha pasado por diferentes fases. «La última vez que hablé en público no sabía que me tenía que operar. En realidad tenía problemas desde que hace año y medio me lesioné en las costillas jugando ante Alcaraz en Indian Wells, aunque entre medias gané otro Roland Garros. A veces los resultados maquillan el día a dia». Pero aunque pensó que si descansaba, la lesión de psoas se podría recuperar, «al final el quirófano fue la única solución posible. Parece que la operación ha salido bien. Además del psoas me operé la cadera. Tuve unos meses complicados al principio. He estado en familia y disfrutado este tiempo, estado de vacaciones -ha pasado mucho tiempo en el mar, navegando- y vuelto a trabajar hace poco. Necesitaba desconectar».

El dolor no le ha abandonado «pero ahora es controlable. Hay veces que el pie no me deja vivir tranquilo, me cuesta hasta bajar la escalera, y eso ocurre a veces. Si te duele es difícil estar feliz, me cambia el carácter cuando me duele más de la cuenta». Para el futuro no tiene «plan» pero «sí la ilusión de volver y ser competitivo. Pero la ilusión no es ganar el Grand Slam, eso me queda un poco lejos por la edad y los problemas físicos. Es difícil esperar ciertas cosas pero cuando vuelva, ya veremos cómo estoy».

Rafa ha manifestado que, como otros tenistas, no ve mucho tenis cuando no juega «pero no me duele. Veo poco tenis sólo por la desconexión. Vi las finales de Wimbledon y el US Open, pero me da la sensación de que si veo tenis no desconecto del todo. Porque no lo veo como simple espectador, analizo las cosas…»

Ahora bien: su estado actual le permite entreabrir una puerta: «dije que posiblemente 2024 sea mi último año. Lo mantengo, pero no lo puedo confirmar al 100%. Creo que hay muchas posibilidades de que sí, porque sé como está mi cuerpo pero cómo estaré en cuatro meses, no lo sé. «No tengo claro qué haré en 2024, porque cambiará por completo según tenga unos objetivos u otros. Si no me recupero es una cosa, si puedo competir a un nivel que me ilusione es otra… Mi ilusión es, a mediados de noviembre, saber cómo estoy físicamente. Son los plazos que nos hemos marcado».

¿Y si resulta que en un tiempo estoy perfecto y me apetece seguir?Rafael Nadal

De hecho, el calendario de 2024 dependerá de su estado: «dejar el tenis en los Juegos Olímpicos sería bonito, si uno está para ello. Pero soy cauto. Si realmente siento que tengo alguna posibilidad de ganar en Roland Garros, tendría que planificar las cosas y elegir un calendario para ello. Si no estoy para hacerlo, igual puedo hacer una gira de despedida a título sentimental. Pero no tengo respuesta aún para estas cosas».

De momento entrena «40 minutos tres días por semana, y mucho gimnasio. Lo ideal sería posible poder competir al máximo posible y jugar los torneos que más me apetezcan».

Y recalca que no ha pensado «dónde quiero jugar mi último partido. Porque no sé tampoco cuando va a ser ¿Y si resulta que en un tiempo estoy perfecto y me apetece seguir?… Vivo el día a día para tratar de darme la opción de decidir. Yo trabajo y luego veremos. Mi cabeza dependerá de mi estado físico».

Recalca que ahora mismo pasa página sobre su rivalidad con Djokovic: «No siento nada cuando veo a Djokovic ganar. Si me hubiera gustado ser el tenista con Grand Slam de la historia, de esto se trata el deporte. Pero no es una obsesión, no me frustra que uno esté mejor que yo. Yo creo que, dentro de mis posibilidades, he hecho lo posible para que las cosas me vayan lo mejor posible. Sí que creo que para Djokovic hubiera sido una frustración de no lograrlp, y quizá por eso lo ha conseguido. Ha tenido la capacidad de querer, ha llevado la ambición al máximo. Yo he sido ambicioso, pero con una ambición sana que me he ha permitido ver las cosas con perspectiva, no enfadarme mucho cuando las cosas no me iban bien en pista… Son culturas. Estoy feliz con ello».

Sobre sus lesiones, señala que «cambiaria muchas cosas en mi vida y mi carrera. He tomado decisiones erróneas a la hora de proteger mi físico. Lo hice cuando era más joven, pero hace años que soy de los que mejos juegan del circuito. Djokovic lo ha hecho mejor porque su forma de jugar le ha permitido jugar más que yo. Pero me he equivocado por pensar en que mis decisiones eran buenas».

Sobre Carlos Alcaraz, opina que «no nos precipitamos en los juicios sobre él. Tiene una proyección brutal. Tiene la potencia, la ambicion… Pero después en las carreras de cada atleta pueden pasar muchas cosas. Es difícil aconsejarle. Soy muy malo para eso, porque yo he aprendido más de los ejemplos que de las palabras. Pero si le tuviera que decir algo, sólo le diría que siga mejorando. Al menos, que tenga la ilusión de hacerlo, que es lo que te mantiene motivado».

Rafa señala que en la actualidad su entrenamiento le aburre «aunque sea lo que más me divierte. Juego sin moverme con la intensidad que acostumbro, aunque la bola va rápida. Me contengo, aunque me apetece moverme. Me he aburrido siempre en las épocas de recuperación, pero eo no me ha quitado nunca el foco ni la ilusión». Recalca que poder volver a jugar a golf le ha ayuado «porque necesito competir».

Sobre sus planes a más largo plazo, señala que no le preocupa porque tiene «proyectos en marcha y creo que las cosas se irán desarrollando con naturalidad. Si hoy dijera adiós al tenis tengo cosas que hacer. La Academia es para mí un proyecto importante. No creo que sea entrenador a tiempo completo pero quizá alguna vez sí. Al fin y al cabo yo vengo del tenis y es muy importante en mi vida».

Rafa Nadal: «Sí me gustaría ser presidente del Real Madrid»

Y hablo también de fútbol. Castaño le preguntó directamente que si le gustaría ser presidente del Real Madrid: «No tengo ese sueño pero sí me gustaria. Pero a día de hoy nada que decir, porque tenemos el mejor presidente posible. Luego, la vida da muchas vueltas y hay que plantearse si está uno capacitado para ciertas cosas. Creo que ‘vosotros’ -dice a Juanma Castaño- montáis películas. Creo que no cumplo los requisitos para serlo».

Y sobre el estado actual de su club de fútbol favorito, cree que «el Madrid ha empezado bien pero estamos muy al comienzo. Hay lesiones importantes como Courtois, Militao o Vinicius… También se ha hecho un fichaje espectacular como Bellingham, pero algún delantero más vendría bien. Recibiría a Mbappé con los brazos abiertos ¿A quien no le gusta Mbappé?» sobre si está molesto porque no haya fichado ya: «No tiene la obligación de venir él cuando los aficionados lo pidamos. Si viene, sentiré agradecimiento, no rencor».