A Canelo Álvarez (59-2-2, 39 KOs) le tocaba convencer en su combate de regreso a los cuadriláteros ante el británico John Ryder, más de seis meses después de su último triunfo ante Gennady Golovkin. El mexicano se anotó un incontestable triunfo por decisión unánime (120-107, 118-109 y 118-109), si bien el campeón indiscutido del supermedio apostó por arriesgar más de la cuenta en una batalla centrada en la ofensiva. La cuestión es, ¿esta versión de Canelo vencería a Bivol, Benavidez o Charlo?

El boxeador azteca llegó a mandar a la lona a su rival hasta en dos ocasiones, en el quinto y el octavo asalto, para deleite del público mexicano que abarrotó el Estadio Akron de Guadalajara, pero su plan se basó esencialmente en demoler a Ryder e ir a por el noqueo sin pensar en minimizar daños. Esto fue más que suficiente para derrotar al rocoso ‘The Gorilla’, aunque ante determinados rivales este plan puede llegar a implicar demasiados daños.

La fiesta en cualquier caso fue absoluta para un Álvarez que regresaba a casa 12 años después. Aunque no hubo noqueo, el jalisciense impuso su guión pese a que su oponente acabara en pie la pelea. Ryder fue un buen rival pues respondió en numerosos asaltos con peligrosos ganchos y no eludió el cuerpo a cuerpo. Más allá de que pueda ser minusvalorado, el inglés generó peligro y fue un rival incómodo.

Canelo sin embargo lo fue minando esencialmente con potentes rectos y de ahí que el londinense terminara por caer un par de veces y casi se fue al suelo en el sexto también. En la mayoría de asaltos el mexicano arrancó más dolor a su rival y su triunfo no admite discusión. Su próxima estación podría ser la revancha ante Bivol, aunque no hay nada confirmado.