Estados Unidos tendrá una revancha en la Copa del Mundo de Qatar 2022. Los de las Barras y las Estrellas acarician una nueva oportunidad para hacer historia, pues en el pasado mundial de Rusia 2018 ni siquiera clasificaron al campeonato. Pese a eso y para mala fortuna de algunos aficionados mexicanos, el combinado norteamericano ya ha podido jugar un quinto partido de la justa mundialista, lo hicieron cuando derrotaron a la Selección Mexicana de futbol hace 20 años.

El mundial de Corea-Japón en 2022 era el primero que se celebraba en tierras asiáticas. El escenario de los octavos de final estaba listo para que el Tricolor consiguiera algo sin precedentes. La selección de México había calificado como primera del Grupo G luego de ganarle a Croacia, Ecuador y empatar contra Italia. Por su parte, Estados Unidos llegó como segundo del Grupo D y tendrían que verse las caras en los octavos.

Los aztecas saltaron al terreno de juego con un ataque endemoniado. Javier Vasco Aguirre mandó un ataque de ensueño formado por Cuauhtémoc Blanco, Jared Borgetti y Jesús Cabrito Arellano. Mientras que Bruce Arena encomendaba el peso de un partido de esa talla a un joven de 20 años, Landon Donovan.

Al minuto ocho del primer tiempo, Brian McBride ponía el primer tanto para los estadounidenses. El juego se mantenía disputado entre las naciones que compartían una rivalidad importante en su zona. El clásico de la Concacaf tuvo un favorito cuando Donovan remató de cabeza dentro del área y puso el 2 a 0 definitivo en el marcador.

La impotencia y desesperación hicieron que Rafael Márquez perdiera la cabeza y fuera expulsado tras una dura falta a Cobi Jones. Nada de ello pudo cambiar el destino, que tenía escrito que Estados Unidos venciera a México en un partido que sacó chispas pero que dejó a los estadounidense como vencedores.

Por si fuera poco, la escuadra estadounidense se quedó muy cerca de llegar a la semifinal del torneo. En aquella ocasión, Alemania los venció 1 a 0 y las esperanzas murieron ahí, en los cuartos de final. Aquella participación fue la más significativa, pues es lo más lejos que ha llegado un equipo de la Concacaf en un mundial. En la copa del mundo de Alemania 2006, los Estados Unidos no avanzaron de la fase de grupos y en Sudáfrica 2010 y Río 2014, solo llegaron hasta octavos de final.

La mancha para el Tri se mantiene vigente, ya que no se ha vuelto a dar un enfrentamiento entre norteamericanos y mexicanos en una copa del mundo. De ese modo, los Estados Unidos pueden presumir de haber disputado un encuentro de cuartos de final fuera de su país gracias al fracaso de la selección mexicana en 2002.